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Ejercicios para gestionar las emociones

Todas nos hemos preguntado alguna vez cómo gestionar las emociones. Controlar tus emociones no implica reprimirlas o ignorarlas, más bien se pueden afrontar de una manera que te aporte bienestar y equilibrio.

Aunque desde pequeños nos hablan sobre las emociones, en algunos momentos de tu vida seguro que no has sabido cómo controlarlas. Es normal, no estamos lo suficiente preparadas hasta que nos encontramos en la situación y debemos aprender a gestionarlas.

Gestión de las emociones

Para conocer cómo gestionar las emociones, primero debemos saber que la gestión de las emociones –o gestión emocional– se refiere a ser conscientes de las emociones que sientes, intentarlas aceptar y regular, adaptándote a la situación en la que te encuentras. La verdad es que puede ser todo un reto, y con el tiempo y el aprendizaje será más sencillo de gestionar. Eso sí, cuando se consigue potenciar la gestión emocional (como puede ser mediante actividades para trabajar las emociones), éstas trabajan en favor de tus intereses y valores. Una correcta gestión determina el éxito en diferentes áreas de tu vida, como puede ser las relaciones con los demás o el trabajo.

Cómo gestionar las emociones

Para poder gestionar correctamente las emociones debes saber qué implica el conocimiento emocional propio, las emociones de los demás y la regulación de tus propias emociones. 

Es interesante canalizar las emociones para poder conseguir el equilibrio y la armonía. De este modo, serás más creativo, productivo y feliz. Impedirás que aquello que sientes se adueñe de lo que eres. Y es que las personas con una alta inteligencia emocional son conscientes de que gestionar y trabajar las emociones no quiere decir que las debamos reprimir, sino que hay que tener en cuenta la manera cómo se interpretan. 

Hablando sobre cómo gestionar las emociones, piensa que es interesante que intentes trabajar el desarrollo emocional para reflexionar correctamente sobre lo que sientes y seas coherente con las conclusiones que tú misma aportes.

Cuando las emociones en calma reinan en tu vida tienes mayor capacidad para trazar objetivos, e incluso lograrlos. Así podrás, además, tener relaciones equilibradas con los demás y puedes dar lo mejor de ti mismo. De ahí la importancia de saber cómo gestionar las emociones. Y recuerda, para lograrlo deberás aportar decisión y constancia. Existen varias actividades para trabajar las emociones que pueden ser tus aliadas.

Los mejores ejercicios para gestionar las emociones

Llegados a este punto, vamos a ver qué ejercicios para gestionar las emociones son los más recomendables:

  • Puedes hacer un trabajo emocional practicando la atención plena. Consiste en detenerse, respirar, no actuar y observar. Se trata de mantener focalizada la atención en el momento presente. Es la actitud de curiosidad, aceptación hacia el momento de libertad. Se puede realizar cada día durante cinco minutos como mínimo, y se puede hacer sentado o acostado, como prefieras y que te vaya bien para concentrarte en la respiración. La cuestión no es dejar la mente en blanco sino sentir, observar emociones y no juzgarlas.
  • Intenta cambiar la manera de enfocar tus pensamientos. Los pensamientos se alimentan por el estado de ánimo, así que si te sientes enfadado, te aconsejamos tener una palabra clave cuya mención detenga los pensamientos. Pueden ser, “stop”, “basta”, “detente”, etc. u cualquier otra que pueda ayudar. También se puede intentar cambiar el  pensamiento negativo. Se puede anotar el pensamiento negativo y al lado escribir uno positivo. Puede parecerte que no funciona, pero en realidad te aportará una ligera sensación de tranquilidad.
  • Diario de emociones. ¿Cómo gestionar las emociones? Plantéate llevar contigo un diario emocional. Verás que escribir es terapéutico y te puede ayudar en las emociones desde otra perspectiva. Con el tiempo también te podrás dar cuenta de qué emociones se repiten, y ya habrás trabajado sobre cómo actuar frente a ellas. Así pues, un diario personal emocional es un buen aliado para la gestión emocional.
  • Ponte frente a un espejo y obsérvate. Otro de los ejercicios para gestionar las emociones es mirarse y sonreír. Aunque no te apetezca, inténtalo, búscate una sonrisa forzada, hazlo por el trabajo emocional. Hazlo durante unos minutos, es ideal durante unos dos o cinco minutos. Recuerda que la sonrisa libera endorfinas. Ya verás cómo te ayudará a controlar las emociones y a obtener una mejor perspectiva de la situación que estás viviendo.
  • Tómate un tiempo para preocuparte. Intenta tomar un break para preocuparte y trabajar el desarrollo emocional. El tiempo que necesites, 30 minutos o incluso una hora. Puedes pensar en todas las preocupaciones y una vez finalice el tiempo que te hayas establecido intenta volver a concentrarte en la realidad. Es una buena opción para no estar todo el día pensando en lo que te preocupa.
  • Uno de los ejercicios para gestionar las emociones más importantes es ser positivo, que tu trabajo emocional se enfoque con una actitud positiva hacia las metas. Ten voluntad. Debes poner de tu parte y mejor si lo haces con una actitud positiva y resolutiva. Evita juzgarte de manera injusta o compadecerte de ti mismo. Comprométete, márcate objetivos para conseguir lo que quieres.
  • Practica arteterapia. Trabajar emociones a través del arte mejora la calidad de las relaciones humanas porque se centra en el factor  y desarrollo emocional, esencial en todo ser humano, ayudándote a ser más consciente de aspectos oscuros, y facilitando el trabajo emocional. Plasma tus emociones, te sentirás liberado.
  • Sé muy observador. Como vamos diciendo, es fundamental que aceptes las emociones, pero también lo es que las comprendas. Si quieres lograrlo es indispensable que incrementes la capacidad de observación. Si les prestas atención, verás como ya empiezas a canalizarlas. Y a lo mejor te preguntarás cómo puedes observarlas. Pues para observar las emociones deberás cuestionarte qué sientes y cómo te sientes. Y es recomendable ponerle un nombre exacto a la emoción que estás experimentando. Cuanto más precisa sea la identificación, más fácil será comprender el por qué de esas emociones.
  • Fortalece tu vocabulario emocional. Para hacer un trabajo emocional adecuado es interesante que cuentes con un vocabulario amplio para evitar confundir unas emociones con otras. Parece que sea de los ejercicios para gestionar las emociones más sencillos, pero no es menos importante. 
  • Presta atención a tu cuerpo, también dice mucho de ti. Una de las actividades para trabajar las emociones sería interpretar las señales de tu propio cuerpo, ya que indican qué clase de emociones sientes.
  • Otro de los ejercicios para gestionar las emociones es ser abierto y agradable. Una mente cerrada indica que una inteligencia emocional es más baja, así que si intentas tener la mente abierta a través del entendimiento y la reflexión, será más fácil afrontar conflictos de un modo tranquilo y confiado.
  • Lee un libro o artículos sobre el tema. Si quieres disfrutar de los beneficios de una buena gestión de las emociones, es buena opción leer algún libro relacionado con esta temática. Son textos que ofrecen conocimiento teórico y práctico, y que te pueden resultar muy útiles. 

No reprimas tus emociones, escúchate y trabaja la manera cómo gestionarlas. Verás como los ejercicios para gestionar las emociones pueden ser buenos aliados y te llevarán por el camino correcto para el desarrollo emocional, y que además responden a la pregunta que hemos ido tratando en este artículo sobre cómo gestionar las emociones.